lunes, 5 de septiembre de 2016

Don Antonio

Don Antonio no sabe nada del mundo, si sabe mucho de la vida, pero poco la entiende y nada se esfuerza. Las cosas de la existencia no le parecen un tema importante, la filosofía resbalo de el cual gota por un  impermeable. Trabaja la tierra, cuida el huerto y los animales (los únicos seres confiables en esta selva). A veces escucha voces que le dicen cosas que no quiere oír, se burlan y ríen. Lo persiguen por el campo, corre y golpea el viento, lucha y pelea con el aire, con su mente, con aquellos que no lo quieren soltar. Un día descubrirá como callarlas y esa noche por fin se liberará.

Don Antonio ya no está.